ESPECIALIDAD: Biología.
TÍTULO: Lo que trajeron consigo.
REVISTA: National Geographic España.
FECHA: Febrero 2014
RESUMEN:
Cuando se habla de grandes descubrimientos, las exploraciones suelen acaparar toda la fama, pero en realidad el hallazgo de un espécimen sobre el terreno no es más que el primer paso, el resto del camino se recorre en las entrañas de los museos, entre las colecciones conservadas con el mayor de los esmeros.
Wunderkammen. Año 1655. |
Esa obsesión grana la historia de las colecciones de museos. En el siglo XVI, la gente se lanzó a reunir objetos variopintos y a presentarlos en salas. Nacían así los Wunderkammern (cuartos de maravillas), expresión de los bello, lo monstruoso y lo exótico. Éstos fueron los antecesores de los museos de la actualidad. En ellos se usaban técnicas de preservación que hacían más mal que bien: sumergían los insectos en alcohol, rellenaban de paja las serpientes, hervían las conchas, etc.
En la actualidad, nos encontramos en la Academia de Ciencias Naturales de Filadelfia.
Aquí se describen, se nombran, se etiquetan y se catalogan las especies, muchas veces décadas después de haberlas encontrado. Aquí los científicos arrancan nuevos secretos a la fauna y la flora pretéritas, conscientes de que cada espécimen muerto contiene una información física, molecular e isotópica únicas e irrepetibles que arrojan luz sobre la evolución, la ecología o la medicina.
La Academia fue fundada en 1812 por naturalistas aficionados. Es el museo de historia natural más antiguo del hemisferio Occidental y uno de los pioneros en fomentar la búsqueda igualitaria del conocimiento. Por ello, es el lugar perfecto para hallar la respuesta más larga a nuestras preguntas.
<Cada espécimen tiene su historia>.
DANIEL HINJOS GARCÍA 4ºA
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