En España tenemos muchas especies de psitácidos en libertad. Las cotorras argentina y de Kramer son dos especies que están consideradas invasoras. Las ciudades de España que tienen mucha población de cotorras son Sevilla, Barcelona, Madrid y Málaga.
La diferencia de estás dos cotorras son que la cotorra argentina fabrica su propio nido, en cual viven varios ejemplares; suelen bajar a comer en zonas urbanas donde se le está dando de comer a especies urbanizadas como la paloma. La cotorra de Kramer, sin embargo, vive en huecos de los árboles y solo los utilizan en épocas de reproducción; estás cotorras no suelen bajar al suelo a por alimento.
Ambas cotorras son dañinas para la agricutura y la biodiversidad; resultan un peligro para las especies locales.
Para evitar que las poblaciones de las cotorras sigan expandiéndose, hay tomar medidas y concienciar a las personas. En los núcleos donde hay un gran número de cotorras se produce un gran gasto económico y que no llega a reducir la especie, por tanto, hay que tomar medidas en núcleos donde la población de cotorra sea reducida.
REVISTA: Quercus, julio 2017.
Carolina Crespo Cruz
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