Voluntarios y agricultores colaboraron en 2017 en favor de
esta especie.
En el año 2012 miembros de SEO-Segovia, comenzaron a buscar
nidos de aguilucho en la campiña cerealista con el fin de protegerlos de las
máquinas cosechadoras.
Ese primer año sirvió para delimitar áreas de cría y diseñar
una campaña de protección. Esta comienza con la llegada de las primeras parejas
de aguiluchos cenizos. El seguimiento de las parejas reproductoras ocupa la
mayor parte de mayo, encontrándose los primeros nidos. Pero la segunda quincena
de junio es el periodo más ajetreado, cuando se encuentran la mayoría de nidos
y comienzan a cosechar algunas parcelas.
En la campaña de 2017 se han encontrado 48 nidos en la
provincia de Segovia. Estos datos son prometedores, ya que el número de nidos y
pollos no ha parado de crecer desde que se inició la campaña.
El procedimiento tras la localización de los nidos consiste
en buscar la colaboración del agricultor para retrasar la cosecha, con el fin
de permitir el desarrollo completo de la nidada. Si no puede demorarse la
cosecha, proceden al vallado de los nidos, que impide que los pollos se
introduzcan bajo el peine de la cosechadora. En general, la mayoría de los
nidos se localizan en trigo, pero también en cebada.
REVISTA: Quercus 2017
Paula González Cividanes
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