En Navarra y Álava se ha llevado a cabo un estudio sobre los buitres leonados,que han permitido que se le colocaran marcas alares a 208 ejemplares de buitres leonados y ponerle una emisora a 13 de ellos (once adultos y dos pollos).
Los buitres se cogieron con jaulas trampa sin hacerles ningún daño, y se separaron con anillas de la Estación Biológica de Doñana.
Con esto se llegó a saber que los buitres cambian mucho de nido, y que muchos de estos nidos al final quedan vacios.
Alberto García Fontánez.
Revista: Quercus 376
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